CÁNCER DE MAMA

¿EN QUE CONSISTE?

El cáncer de mama consiste en un crecimiento anormal y desordenado de las células cancerosas en dicho tejido. La mayoría de los tumores que se producen en la mama son benignos, no cancerosos.
Al inicio de este proceso cancerígeno, la mujer no suele presentar síntomas. El primer signo que presenta suele ser, principalmente, el bulto en la zona afectada y en ocasiones aparecen cambios de color en la misma.

TIPOS

• El carcinoma ductal in situ
• El carcinoma ductal infiltrante
• El carcinoma lobular in situ
• El carcinoma lobular infiltrante (o invasivo)
• El carcinoma inflamatorio
  

SEÑALES DE ALARMA

• Cualquier tumoración en la mama.
• Cualquier deformación en el contorno natural de la mama.
• Cualquier retracción o desviación del pezón.
• Cualquier engrosamiento u hoyuelo en la piel de la mama.
• Erupciones alrededor del pezón o de la areola.
• Venas prominentes sobre las mamas.
• Secreción sanguinolenta por el pezón.
• Tumoración dura en la axila.
  
  

Circunstancias que hacen a una persona más propensa de desarrollar el tumor en la mama

• La edad: el riesgo aumenta mayormente con la edad. La mayoría de las veces dicho cáncer se produce sobre los 50 años, el riesgo aumenta a los 60 años y por debajo de los 35 resulta muy poco frecuente.
• El sexo: es claro que las mujeres son las más propensas a desarrollar el cáncer de mama, sin embargo, los hombres también pueden contraerla y la probabilidad de que la sufran es de uno por cada cien mujeres.
• Antecedentes familiares: se puede afirmar que las posibilidades aumentan si una madre, hermana y/o hija ha sufrido esta enfermedad, además, el riesgo se eleva si el familiar padeció dicho cáncer antes de la menopausia, o si afectó a los dos senos.
• Haber sufrido otro cáncer: el riesgo de cáncer de mama aumenta si se ha sufrido previamente otro cáncer, especialmente de ovario o de colon.
• Menopausia tardía (posterior a los 55 años)
• No haber tenido hijos, o el primer parto a partir de los 30 años.
• Factores medioambientales: está en investigación la posible influencia de pesticidas, contaminantes en agua y comida, entre otros.
• Estilo de vida: se han hallado en investigaciones actuales un posible vínculo entre el consumo de alcohol y el desarrollo de cáncer de mama.
• Obesidad: muchos investigadores indican que seguir una dieta baja en grasas y rica en frutas y verduras, así como el ejercicio físico de forma regular pueden ayudar a prevenir la aparición del cáncer de mama, pero todavía no se tiene ninguna constatación científica definitiva.
• Estrés: las investigaciones indican que no es nada conveniente llevar una vida extremadamente activa. Llevar una vida estresante es dañino para la salud y esto puede favorecer la aparición de enfermedades.